Bien, intentare explicar en esta breve reseña lo que es esta singular experiencia teatral; digo experiencia porque es mucho mas que una obra o espectáculo, es un sumatorio de distintas texturas que estimulan los sentidos a lo largo de la noche.

La primera parte se titula S.D.D.S., una obra corta, aparentemente gestada como creación colectiva que parodia sobre el funcionamiento burocrático en una dependencia gubernamental. Sofía Farias Alves; Antonella Bataglia y Jésica Moreno conforman un trío que se entienden muy bien arriba del escenario y con un trabajo muy elaborado, desde la composición de los personajes hasta la impronta corporal que le imprimen; van tejiendo una seguidilla de situaciones hilarantes que terminan de redondear un producto más que agradable.
Llega el momento de la «Experiencia wino» mientras en el escenario se desarrolla un algo gracioso monologo sobre las vicisitudes de un sommelier, se invita a los espectadores a degustar de exquisitos vinos muy bien acompañados de una tabla de quesos; convirtiéndose en una experiencia teatral interesante que abarca de los sentidos.
Cierra la noche «Burlesque» un viaje al erotismo, a la sensualidad, al dejarse llevar a un terreno donde lo sensorial le gana a la razón. Sin una estructura dramática,se van sucediendo números de burlesque con un tono de modernidad, con diversidad de cuerpos y bellezas que no responden a hegemonías, pero con mucha sensualidad y en un clima festivo. Mención especial para el musical final, brillante como cierre.
En fin, una experiencia distinta a la que vale la pena entregarse.
Teatro El alambique. A.R.