El pasado 15 de octubre el Teatro Colón retomó la puesta en escena del gran clásico del Ballet: Giselle (1841).

Han pasado 183 años del glorioso estreno de Giselle en París con Adolphe Adam en la composición de la partitura, la coreografía de Jules Perrot y Jean Coralli y libreto de Théophile Gautier y Jules-Henri Vernoy. Esta obra fue la cumbre del ballet clásico romántico en el mundo, forma parte del ballet blanco que, junto obras como La SÍlfide y el Lago de los Cisnes ya forman parte del repertorio estándar del Colón.
Gustavo Mollajoli es el encargado de reponer este clásico. El célebre coreógrafo argentino dirige al ballet estable del teatro; entiende la importancia del material que trabaja, la sensibilidad, estética e intensidad. Es por eso que dota a los bailarines de liviandad, elegancia y sostificación, especialmente gracias al trabajo de Camila Bocca, Ayelén Sánchez, Rocio Aguero y Beatriz Boss; bailarinas que se ponen la piel y los pasos de la frágil Giselle.
Cabe destacar que Giselle tiene dos actos que se pueden resumir en dos lugares: La aldea alemana otoñal donde Giselle se refugia y el cementerio donde espera a su amado; gran parte de llevar la narrativa de Giselle a lo material y visual es gracias a la puesta del eterno Nicola Benois. El uso de la carpintería es vital pues toda la obra transcurre en exteriores, no conforme con la escenografía, Benois se encargó de vestir a los bailarines y extras, dotandole majestuosidad a las telas, clacisimo, aristocracia y delicadeza.
Los colores de otoño resplandecen en Giselle, quedando para el acto final el blanco fantasmal característico de la obra.
Javier Logioia Orbe es el director musical de la delicada partitura de Adolphe Adam. El músico entiende y siente la historia de Giselle y la hace transmitir a los pasos de los bailarines y al corazón de los espectadores.
Giselle es un clásico que a sus casi doscientos años de su estreno, pretende seguir en la eternidad y el público porteño lo recibe con brazos abiertos en cada función.
Escribió Sebastián Arismendi para La Butaca Web.