G Sony, un nombre que resuena desde las batallas de freestyle hasta los charts de música urbana, demostró el pasado jueves 30 de octubre en Niceto Club que su versatilidad no tiene límites. Lejos de conformarse con un solo género, el artista inauguró una nueva etapa musical con un show arrollador y vibrante, que fusionó con maestría la cumbia, el cuarteto y su inconfundible esencia de improvisador.

Durante más de una hora y media, Niceto se convirtió en una pista de baile y una caja de resonancia para el nuevo sonido de Sony. Acompañado por una banda completa y bajo la potente producción musical de Kekelandia, el artista logró un sonido bailable, emocional y, sobre todo, auténtico. Repasó parte de su nuevo repertorio, incluyendo el reciente lanzamiento “Engualichao”, y regaló al público un tema inédito que formará parte de sus próximos lanzamientos.
La noche no fue solo de música propia; Sony también exhibió su capacidad para reinterpretar clásicos. Versiones renovadas de temas icónicos como “Voy a olvidarme de mí”, “Corazón Partío”, “Una Cerveza” y “Oye Mujer” encendieron aún más al público, que coreó cada estrofa.
Uno de los momentos más emotivos llegó con un homenaje a Diego Maradona. Junto a Iván Sosa, G Sony interpretó “La Mano de Dios”, un cruce de pasión futbolera y sentimiento popular que electrificó el ambiente.
La conexión con su historia también se hizo presente. En una breve pausa, una proyección de video repasó los puntos clave de su trayectoria en el freestyle, desde sus inicios en El Quinto Escalón hasta su consolidación como referente de la música actual.
El guiño a sus raíces alcanzó su punto máximo con la aparición de Iacho, histórico del circuito de freestyle, quien subió al escenario para improvisar beats en vivo. Allí, Sony desplegó su talento innato con rimas espontáneas, demostrando la conexión total que mantiene con el arte de la improvisación.
El broche de oro fue una sorpresa que resumió la noche y proyectó su futuro: un freestyle cumbiero inédito. Fusionando la energía latina con melodías románticas e improvisación, G Sony dejó en claro cuál es su diferencial en la escena: la capacidad de tomar lo mejor de su sensibilidad, su voz y su raíz freestyler para combinarlo con el ritmo y la alegría contagiosa de la cumbia.
Con un Niceto encendido de principio a fin , G Sony no solo dio un concierto; inauguró un capítulo fresco, popular y prometedor en su carrera, reafirmando que es un artista en constante movimiento y evolución. Esta nueva etapa, sin dudas, apenas comienza .