Crítica: La muerte de un comediante

Critica por PablinTeve


Sinopsis
Juan Debré es un actor que recibe un llamado que le confirma lo peor: en pocos meses, una enfermedad terminará con su vida. Antes que ocurra, buscará cumplir un sueño que empieza en su infancia y cruzará el oceáno para cumplirlo.



Lo que me gustó
Hay películas que nacen del recorrido clásico de producción, y otras que parecen surgir de un impulso colectivo, casi espiritual. La muerte de un comediante (2025) entra de lleno en esta última categoría: no solo cuenta un viaje cargado de emociones, sino que también es el resultado de un proceso detrás de cámara tan atípico como apasionante. Lo que arrancó como una idea suelta de Diego Peretti allá por 2018 terminó transformándose en el nuevo largometraje de Orsai Audiovisuales, filmado entre Buenos Aires y Bruselas y financiado por una comunidad entera de productores que siguió cada paso. Ese espíritu artesanal, colaborativo y transparente se filtra en cada rincón de la película.
Lo que no me gustó
Una apuesta fallida que no consigue sostener ni el guion, ni la dirección, ni las actuaciones, y que termina atrapada en un ritmo lento y monótono. Aunque la transformación interpretativa de Diego Peretti es, sin dudas, lo más rescatable, varias de sus decisiones como director —especialmente el uso de la voz en off y ciertos gestos excesivos— se sienten pretenciosas, forzadas y hasta desconectadas del tono que la película intenta construir.

Puntaje: 5/10

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