Por Marta Ros
Pixel.lu nos ofrece una nueva aventura para nuestra Nintendo Switch, Sir Lovelot, un título de plataformas en 2D al más puro estilo clásico.

De torre en torre, de dama en dama
Sir Lovelot nos traslada a un mundo idílico donde el amor y su consumación se convierten en nuestra misión principal. Nuestro caballerete avanzará por diversos niveles con un desarrollo bastante rápido con la única misión de alcanzar a la dama que nos espera en el torreón.
Pero como buena dama que es, no le valdrá con que trepemos hasta ella, sino que tendremos que llevarle un regalo. Así, alargamos un poco más el nivel teniendo que conseguir una florecilla para nuestra damisela y que así ella nos lance su melena para trepar hasta la alcoba.

Corre, salta, trepa
El juego no da mucho de sí. Son niveles cortos cuya duración únicamente dependerá de nuestra pericia con las plataformas, pero que por regla general no durarán más de 3-4 minutos.
Mientras avanzamos esquivando enemigos, pinchos y salvando los huecos que nos encontremos tendremos que ir recogiendo (si queremos) algunos objetos por el camino. Estos objetos solo harán que el nivel tenga algo más de interés y duración, pero no afecta en absoluto al desarrollo del juego.
Lo bueno es que tenemos un total de 45 niveles repartidos en cuatro mundos diferentes, cada uno con sus dinámicas por lo que, a pesar de ser un juego sencillo y de corte algo repetitivo, juega con esa variación que le da un gusto diferente donde cada vez nos enfrentaremos a un elemento diferente.

La dificultad justa
Como todo gran clásico del plataformeo en 2D, Sir Lovelot se caracteriza por ser un juego algo complicado, aunque realmente en ningún momento (salvo si se nos da muy mal) sentiremos que este juego no es para nosotros. Los niveles son cortos y asequibles y podemos ir directos a por la flor y la torre evitando alargar nuestro sufrimiento en exceso. Por otro lado, contamos con puntos de control que guardarán nuestro progreso en el nivel evitando que tengamos que repetir ciertas zonas que nos cuesten más de lo habitual.
Lo divertido y “complicado” del juego reside, como es lógico, en conseguir el 100% de todos los niveles e incluso de mejorar nuestra marca personal cada vez que juguemos. Fuera de esto, resulta un juego de una dificultad aceptable aunque igual no para todos los públicos ya que como digo es un juego completamente basado en nuestra habilidad con las plataformas.
No mejoramos, solo avanzamos
Si bien es cierto que el juego da lo que da y no hay por donde estirar, sí que hecho de menos una progresión de nuestro protagonista y es que, a pesar de tener 45 niveles, acabaremos igual que empezamos: con el doble salto y un disparo bastante triste.
No hay posibilidad de mejorar o adquirir nuevas habilidades y eso al final hace que nivel tras nivel vivamos una y otra vez lo mismo.
Realmente llega un punto en el que hasta se agradece que el juego sea tan rápido porque acabas inmerso en una espiral de repetición de lo más tediosa.

Conclusión
El juego es entretenido, aunque no es una gran aventura. Un juego para pasar ratitos muertos que le darán vidilla a nuestra Switch.
Realmente recomendable para los amantes de los juegos de plataformas en 2D y estilo pixel cuidado, pero igual no es lo más recomendado para un público más genérico que no esté acostumbrado con estas dinámicas.
Guarda un par de secretos interesantes que os recomiendo descubrir y que le dan un toque diferente y llamativo al juego.
Calificación 6,5/10