Crítica: Mar.ia


Por Gustavo Condano

Un ciborg con cuerpo de actriz porno y controlado por una inteligencia artificial decide tomar venganza, ¿qué puede salir mal con eso? Posiblemente todo. El tema es si vale la pena quedarse para ver el resultado, lo vemos más abajo.



La historia:
Alina es una sonidista, interpretada por Malena Sanchez, que es llamada a una grabación clandestina en el medio de la nada a último momento. Accede porque es buen dinero, pero allí se encuentra con Melina, interpretada por Sofía Gala, y Marco con quien solían ser un trio y las cosas no terminaron bien para ella.
La grabación es de una película porno, pero la particularidad es que actúa en ella una  María Black, una reconocida actriz del género que dejo de hacer películas porque había tenido un accidente y todos la daban por muerta.
En medio de la grabación, si…ese tipo de acción, la actriz tiene un ataque y fallece. Pero el director y el productor no quieren llamar a la policía y deciden llamar a otro tipo de gente que promete solucionarle sus problemas, aunque pronto se darán cuenta de su error. ¿Podrán Ailina y Melina salir de esta oscura situación con vida? Tendrán que ver la peli para enterarse.

¿Qué me gustó?
Me gustan las pelis que toman riesgos y salen de la zona de confort, claro que puede salir mal tomando ese camino también.
Malena Sanchez ofrece una buena interpretación que se sostiene y sostiene en parte el film.

¿Qué no me gusto?
El argumento está demasiado tirado de los pelos y tiene varios agujeros cuando una se pone a pensar un poco.
El plan que está detrás de todo esto no tiene mucho sentido y pareciera no buscar el objetivo que dice tener sino simplemente “justificar” la trama. Se tienen que dar demasiadas casualidades para que dicho plan pueda cumplirse, cosa que por supuesto funciona a al perfección gracias a la magia del guion.
El humor asociado con esta trama podría funcionar si fuese constante, porque metas un chiste en el medio de la película en referencia a Robocop y Terminator suena más como un recurso barato y fuera de lugar.
Los planos son demasiado abiertos para dar el suspenso y la tensión necesaria. Entiendo que tendrá que ver con una cuestión de costos tal vez, pero se pierde clima, cosa fundamental para este género (o cualquier género).
Las heridas de bala pueden no matar a una persona, pero al menos al personaje le tiene que doler de forma sostenida.

¿Aporta algo nuevo al género?
Está peli vendría a ser una mezcla entre el cine de terror, sci-fi y la agenda de género. Y aunque les parezca difícil de creer no es la primera en hacerlo, hace unos años se estrenó «muere, monstruo, muere» (2019), una peli argentina que mezcla el terror fantástico con esta agenda de una forma mucho más interesante que les recomiendo ver.
Quizás la mezcla con el cine porno se puede ver como una novedad, en mi opinión bastante desaprovechada

¿A quién recomiendo ir a ver esta peli?
Para los fans del consumo irónico tal vez, no descarto que en unos años sea una peli de culto como puede ser “Charly días de sangre” (1990).

Disponible el 13 de junio en cines
Calificación: 6/10
Duración: 76 minutos

Para otras opiniones sobre cine y algún que otro cuentito seguirme en Instagram @cronicadeunavidacualquiera.

Deja un comentario