Por Castor Troy
Una vuelta a los orígenes. Así me siento después de saborear este título con un dulce regusto de Metroidvania. El título lanzado en 2019 en Pc por Julian Laufer finalmente aterriza en Nintendo Switch.

La historia narra la travesía del protagonista (Nikolay Bernstein) ,una suerte de Indiana Jones, en busca de la cuna de la humanidad. Durante nuestra aventura contaremos con la inestimable ayuda de su robot Buddy que aportará varias capas de jugabilidad que dota a este juego de mecánicas jugables dignas de mención.
El apartado visual se caracteriza por unos gráficos que son un claro homenaje a los juegos de 8 bits destacando el buen uso de la paleta de colores (en especial los colores azules y rojos) para hacer sentir que estamos en un juego ambientado en los años 80. Los escenarios cuentan con partes de plataformas relativamente exigentes que conviene analizar previamente antes de lanzarse “a lo loco”. El punto más flojo quizás sea el menú donde se nota que el desarrollador no lo ha cuidado con mucho mimo.

El apartado jugable es una auténtica delicia. Se trata de un claro (y honesto) homenaje a las sagas de Metroid y Castlevania. El personaje tiene una serie de mecánicas jugables (rodar, saltar de pared en pared para llegar a zonas elevadas o el clásico dash) que están muy bien implementadas. Disponemos de un mapa bastante amplio que podremos desplegar para ir avanzando e ir descubriendo nuevas zonas para mejorar al personaje y poder pelear con mayores opciones ante los diferentes enemigos y jefes finales. Como os he comentado antes es muy necesario conocer los movimientos de Buddy para llegar a determinadas zonas que a simple vista parecen inalcanzables. Un detalle muy simpático para los jugones más mayores es que el personaje sólo puede disparar en el sentido de los cuatro puntos cardinales sin posibilidad de disparar en diagonal. Como buen juego con regusto a clásico de 8 bits no existen muchos puntos de guardado por lo que requiere que avancemos en busca de mejoras y enfrentarnos a los enemigos más duros con el arsenal mejorado. Los enemigos finales no tienen un término medio. Existen algunos con rutinas muy fáciles de reconocer mientras que otros nos obligarán a repetir en numerosas ocasiones.
El apartado sonoro flojea ya que tiene melodías agradables donde destaca el ritmo durante los enfrentamientos con los jefes finales mientras que durante el resto del juego resulta bastante monótono.

En resumen puedo deciros que se trata de un título que hará las delicias de los jugones más curtidos así como los jugadores casuales e inclusive a los jugadores noveles que quieran disfrutar varias tardes descubriendo un juego con muchos momentos divertidos y algunos detalles mejorables.
Espero que os haya gustado este análisis y nos vemos pronto en La Butaca Web.
Os quiero 3000:)
Calificación: 8/10