El viernes pasado tuvimos el placer de asistir al teatro NUN para presenciar una obra llamada «Carne de consumo personal». Se trata de un monólogo creado e interpretado por Jorge Thefs , dónde nos cuenta en primera persona un relato que trata temas como la gordofobia y la aceptación personal.
Carne de consumo personal sirve como una catarsis hecha monólogo, dónde el intérprete se presenta de una forma distendida hacía el público, pero en dónde luego inicia un intenso texto con un carácter personal. Sus primeras palabras hacen alusión a su peso, que con sus más de 100 kilos actuales, no sabe si vale más vivo o vebdiendose como una pieza de carne. De esta manera presenciamos un relato sobre los prejuicios, no tanto sobre lo exterior que ya conocemos, sino aquellos prejuicios internos, de los que quizá no todos vivimos en carne propia. La obra nos da espacio también para hablar de los amores, los sueños y la superación , la comida puede ser parte de nosotros, pero no es todo lo que nos define.
La obra se lleva a cabo a través de una puesta perfomática, dónde también se realiza un excelente uso de recursos audiovisuales que acompañan de manera inteligente al texto, que si bien es breve, es conciso. Jorge nos deja un excelente trabajo en lo actoral, ya que deja todo en el escenario en sus cuarenta minutos de obra, dónde literalmente expone el alma y su cuerpo para transmitir lo que quiere contar. Justamente hablando del cuerpo, la obra cuenta con un desnudo que ataca cualquier prejuicio, que aunque no sea algo muy usual de ver en teatro, es efectivo a la hora de materializar el mensaje de la obra.
Carne de consumo personal puede parecer una obra desafiante y provocadora, pero en realidad resulta ser la demostración más sensible que un autor puede mostrar en un escenario, su historia en carne propia.
Carne de consumo personal puede verse los viernes a las 23 horas en Nün teatro bar (Juan Ramírez de Velazco 419). Les escribió Daniel Alvarez para La Butaca Web.