En las vísperas de las nuevas restricciones, el miércoles tuvimos el placer de asistir al teatro el picadero para ver la obra Así de simple. Justamente minutos antes de ingresar a la sala, es cuando se hablaban de los nuevos anuncios, que incluía el cierre de actividades culturales en espacios cerrados, así que fue la última obra presencial que pudo disfrutar su servidor. La obra nos trae a una pareja como protagonista, su amor y ruptura, y como se ve todo reflejado con las emociones representadas por actores. Se trata de una obra sensible, tierna y muy divertida.

Seguramente muchos se acordarán del film de Pixar «Intensamente», dónde las emociones eran representadas por unos seres que se encuentran en la cabeza de las personas. Bueno, aquí nos muestran un planteamiento parecido, estás emociones están llevada a cabo por otros dos actores que no son más que otra versión de los protagonistas. Clara y Joaquín es una pareja que acaba de separarse, a cada personaje, se le suman dos personas vestidas con la misma ropa, que representan una versión de cada uno de ellos. Una de ellas es la versión sensible, la que llora, ríe y se enamora con mucha intensidad, la otra versión es la racional , la que mira la situación con mayor escepticismo, que intenta usar la mente antes de dejarse llevar por el corazón. Estas dos versiones forman una persona, cada una choca a medida que las cosas suceden, compartiendo el proceso de enamoramiento, convivencia y separación. La obra es muy humana, es imposible que no podamos sentirnos identificados , porque aunque no tenemos a personitas al lado separándose por emociones, somos un conjunto de ellas, y nos lo muestran de una manera identificable y con mucho humor.
Si hay algo que hace funcionar la obra como es, es la labor que realizan cada uno de los actores. Cada personaje tiene una intención y un rol específico, pero también se tiene en cuenta que en realidad existen dos personas, Joaquín y Clara. Tenemos un excelente trabajo de coordinación, en la que estos seis personajes interactúan y todos forman parte de la historia de la pareja. La dirección de Sofía González Gil es notable, ya que traslada una puesta que parece simple , como el título de la obra, pero que denota profundidad a la hora de darle una personalidad a las emociones, todo ello acompañado de un gran trabajo actoral.
Así de simple es una de las obras más lindas que podrás ver cuándo regresen los teatros a Buenos Aires, esperamos que sea pronto, y que ellos estén más que listos para mostrar sus emociones, y obviamente, hacernos emocionar a nosotros.