Por Matias Dinardo
Pikuniku es una rareza independiente que brilla es Switch más allá de su aparente simpleza. A pesar de ser muy sencillo en sus gráficos y música, este título gana en narrativa y creatividad. Los diálogos, el humor y la trama conspirativa están muy bien logrados.
El protagonista que le da nombre al juego, es un óvalo rojo pequeño con un par de patas que le gusta girar y patear todo lo que se le cruce en el camino. Debe rescatar a varios pueblos que están sumidos bajo el régimen de una corporación que aparentemente es buena, con un discurso de felicidad y dinero gratis para todos los ciudadanos.
Este juego combina muy bien los diálogos interpersonales para resolver problemas, al mejor estilo “The legend of Zelda”, sumado a un juego de plataformas y aventuras a lo “Sonic” (con jefes robot similares y caminos serpenteantes para hacerse pequeño) y resolver puzzles a lo loco, como si de “Limbo” se tratara, por nombrar algo parecido.
Tiene un modo de juego cooperativo que es muy divertido para jugar de a dos. Hay que destacar la perfecta traducción al español, dónde no se pierden los juegos de palabras y los diálogos humorísticos.
En resumen, Pikuniku es un juego interesante, muy divertido y con ingenio, que es consciente de sus puntos fuertes y demuestra que no hacen falta buenos gráficos para generar un buen videojuego.
Lo mejor:
- Los diálogos divertidos e ingeniosos
- El nivel de dificultad de los puzzles a resolver
- El mundo a explorar
Lo peor:
- El control de las patadas es caótico cuando queremos apuntar a algo específico
- Es corto, no más de 3 o 4 horas de juego, aunque tiene misiones secundarias
- En Switch no hay control de logros
Calificación: 7.5/10
Plataforma: PC, NSW
Género: Puzzle, Plataformas
Lanzamiento: 24/01/2019
Desarrollador: Sectordub
Texto; Español
Editor: Devolver Digital