Por Agustín Villegas

La película de la polémica…

A mí en lo personal los dichos extremistas de Brie Larson en contra de los hombres blancos heterosexuales no me movieron mucho con respecto a lo que esperaba de éste film, soy capaz de comprender como las grandes empresas tienen que bajar linea para contentar al poder mundial real. Nosotros como espectadores y/o críticos tenemos que contemplar a las películas (u obras artísticas en general) como un TODO, analizar la calidad de las historias y, teniendo en cuenta que esto es cine de lo más comercial, observar como estas se adaptan a las tendencias actuales que los estudios PIENSAN que atraen público nuevo. No quiero sonar despectivo con respecto al cine hollywoodense, de hecho es el tipo de cine que más suelo consumir y del que más me gusta escribir debido a la trascendencia que éste tiene entre los lectores, pero los riesgos que las grandes empresas toman se basan en movimientos sociales protagonizados (en su mayoría) por gente que, si de verdad estuviese instruida con respecto a la cultura pop, no pediría personajes que muestren una diversidad superficial que solo entre por los ojos más que por los sentimientos … y claro, ¿como van a confirmar que sus petisiones son llevadas a cabo? la industria necesita demostrarlo en los aspectos mas visibles (posters, portadas, trailers) de lo que ellos no quieren consumir pero sí cambiar. Sarah Connor no necesitaba autodeteminarse como una mujer fuerte para que el espectador la considere como tal ya que sus solas acciones dejaban en evidencia su personalidad guerrera. El Joker, uno de los villanos más carismáticos, emblemáticos y conocidos de la historia, es abiertamente bisexual y jamás tuvo que confirmarlo con un poema de inclusividad para que se entienda. Ejemplos como estos hay miles y en caso de «CAPTAIN MARVEL» estamos ante un personaje aburrido que intenta probarnos a todos que no tiene que probarnos nada … vaya paradoja.

Hablemos un poco de la historia:

Vers (Brie Larson) es una guerrera Kree sin recuerdos de su vida pasada que lucha por la seguridad del universo. Junto a su grupo liderado por Yon Rogg (Jude Law) se ve envuelta en la emblemática guerra contra los Skrulls, unos aliens capaces de infiltrarse en cualquier sociedad gracias a su poder de convertirse en cualquier ser que vean. La aventura de nuestra protagonista la trae a su planeta tierra natal, en donde se alía con un joven agente llamado Nick Fury (Sam Jackson) para llegar a la verdad de la milanesa.

Antes de empezar con las indiscutibles falencias de la película quiero mencionar lo que me gustó. Samuel Jackson ofrece un acercamiento mucho más casual, cómico y hasta humano que el de su versión madura y tuerta vista en los films situados en la actualidad del universo AVENGERS. Además su rejuvenecimiento digital fue más que aceptable, pero que conste que el actor está en escabeche y con un poco de maquillaje le podemos creer a cualquiera que su personaje este en sus 40s. La dupla de Fury con el gato Goose es de lo mas gracioso y tierno que los guionistas lograron idear. El villano interpretado por Ben Mendelsohn es otro gran elemento, no puedo revelar el POR QUÉ exactamente pero su personaje nos permitió ver una faceta del actor alejada de lo que estamos acostumbrado a ver en sus papeles más recientes. Volvemos a ver personajes como Phil Coulson (Clark Gregg), quien actualmente goza del éxito teniendo su propio show de televisión, al guerrero Korath (Djimon Honsou) a quien se le da un poco más de personalidad que en su primera aparición en ‘GUARDIANS OF THE GALAXY’. Lee Pace retorna como Ronan el Acusador pero sin aportar nada muy nuevo a la trama. Y para cerrar la forma en la que lograron plasmar la decada de los 90′ fue sublime, desde la música hasta los chistes de epoca nos recuerdan que ya estamos bastante mayores. Por lo general consideraría esto negativo por el enfrentamiento con mí propia mortalidad que ésto conlleva, pero fue una de las primeras películas en hacerme sentir nostalgia por cosas que los nenes de ahora ni siquiera conocen.

Pasemos a lo malo…

Lamentablemente y como muchos esperamos Brie Larson fue una de las peores actuaciones protagonicas del universo Marvel hasta la fecha. Ésto no es solo culpa de la actriz, el guión se molesta constantemente en probarnos que Carol tiene la posibilidad de sobreponerse ante obstaculos que ni ella sabía que tenía en frente. Los personajes secundarios nos quieren hacer creer que ella es lista, graciosa y genial pero en ningún momento fui capaz de captar esa sensación. Cero encanto, cero carisma y cero interes con respecto a su historia.

El apartado visual de la película me recordo al de ‘SOLO: A STAR WARS STORY’. Todo es tan oscuro que apenas podemos ver lo que esta pasando, esto nos distrae muy facilmente de la tensión dramática y, más que nada, de las escenas de acción.

Hay muchos detalles feos de la historia que si mencionase se considerarían spoilers grosos, pero les adelanto que el sorpresivo plot twist es innesesariamente desleal al material original y tira a la basura la posibilidad de hacer TODA una fase de películas centradas en un evento comiquero que esperaba ver en cines.

En definitiva yo si fuera ustedes me ahorraría la entrada de ‘CAPITANA MARVEL’ para ‘AVENGERS: ENDGAME’. Si se limitan a enfocar la atención en los origenes de Nick Fury y en la creatividad de algún que otro concepto de ciencia ficción quizás está sea una película medianamente aceptable, aunque es probable que solo recuerden lo escencial para cuando veamos la guerra final contra Thanos … espero con todas mis fuerzas que Carol no sea la heredera del protagonismo del universo cinematográfico Marvel, porque de ser así dudo que muchos mantengamos el interés.

Calificación 5/10

La película de Sergio Estilarte y Federico Velasco, cuya cáscara es estigmatizar a los CallCenter. La historia se circunscribe a una noche laboral, que aparenta ser una más, en la empresa, Kord Entreprises.

El film arranca cuando cada uno de sus protagonistas, va cruzando los molinetes para ingresar al Call Center a trabajar. Cinco jóvenes, cinco personalidades quienes saludarán o no, a Jorge, al de Seguridad, antes de entrar. Con música de fondo «Canción para nadie» de SinTecho.

Pero a medida que las horas avanzan esa cáscara se va cayendo y la pulpa de la fruta es mostrar a una jefa, Carla (actriz Silvina Diez), atrincherada en su podio, controlando a Álvaro (actor Emiliano Addisi), pinta ser el perfil de responsable del grupo. Caro (actriz Vanina Balena), la solidaria, soñadora, busca la fama, presentándose a campañas de modelos. Ella no renunciará a lo que desea y equilibra las necesidades del grupo. Lau (actriz Thelma Fardin) quien tendrá una larga y dura noche por delante, por la pesada carga emocional que lleva en la mochila, y que esta es la noche elegida para descargarla. Dante (actor Demián Salomón), un pollito mojado, la inseguridad ataca en todos sus frentes en un aparente descreimiento de todo, quejoso del sistema, pero sin hacer nada para cambiar y Sebastián (actor Alejandro Lifschitz), con ínfulas de superado, hay un niño disfrazado de adulto al que le gustan los comics y que está de vuelta, de todo y de todos.

Este enjambre humano será quienes dirán ¿En qué podemos ayudarlo? toda vez que un cliente abonado a la conexión de Internet llame por algún inconveniente técnico.

El disparador, en este film, es que en «casa de herrero, cuchillo de palo» se les «cae el sistema» deben esperar las manos mágicas del servicio técnico para que lo restablezca. Es entre una a dos horas, donde los teléfonos dejan de sonar y les puedo asegurar que no serán horas muertas sino por el contrario, estarán muy vivas, ese tiempo, les servirá para conocerse un poco más y cada uno abrir su mochila para compartirla con el resto.

La película es excelente, en los aspectos técnicos, las tomas son precisas en duración, en el mensaje. El elenco es robusto, están todos muy compenetrados con sus personajes, la dupla Demián Salomón y Alejandro Lifschitz, juntos se potencian. Emiliano Addisi y Thelma Fardin, como Demián Salomón y Vanina Balena, en la ficción son parejas perfectas.

Hay películas que para mi deberían ser además valoradas por ser clásicas en el género. Por ejemplo, La Fiaca protagonizada por Norman Brinsky, La Patagonia Rebelde con Alterio y Pepe Soriano o Caballos Salvajes de Marcelo Piñeyro y así muchas más. CallCenter voto por agregarla a la lista de clásicos, por la originalidad del tema tratado, por lograr la desnudez de los personajes, el reencuentro después del tsunamí. La valentia de mostrar a personas de carne y hueso, las que están del otro lado de un teléfono.

No solo se conforma con mostrar sino con demostrar que ese grupo humano, no solo puede preguntar ¿En qué podemos ayudarlo? sino que se animan «a ayudarse a ellos mismos» y mucho más.

Calificación: 10/10

ELENCO

Thelma Fardin LAURA

Demián Salomón DANTE

Vanina Balena CAROLINA

Alejandro Lifschitz SEBASTIÁN

Emiliano Addisi ÁLVARO

Silvina Diez CARLA

FICHA TÉCNICA

Dirección: Sergio Estilarte – Federico Velasco

Guión: Sergio Estilarte – Federico Velasco

Dirección de fotografía: Hugo Duarte

Dirección de arte: Mariana Vieyra

Dirección de sonido: Juan Donatti

Asistente de dirección: Fabián Forte

Montaje: Ramiro Velasco

Postproducción de sonido: Leonardo Fucci

Producción: Pamela Gionco – Sergio estilarte – Federico Velasco

Jefe de producción: Juan “Elvis” Pereyra

Duración: 92 Min.

Diana Decunto

consignas.de.radio@gmail.com

Documental sobre la vida de Salvador Benesdra, estrenada en el cine Gaumont a partir del 28 de febrero.

El trabajo de investigación y guionado es de Ariel Borenstein, Damián Finvarb. Para escribir la biografía, es una tarea dura, porque es escarbar en los fragmentos íntimos que componen el todo que hace sobre la vida y obra de una persona. Porque identificarlo como periodista, militante gremial, escritor, psicólogo, traductor, es contar de una descripción abreviada de la cual nos permite deducir a un individuo multifacético que lejos está de dejar que la vida transcurra en la otra vereda.

Entre gatos universalmente pardos, es una documental que encierra tres historias, en paralelo. Una encontrarse con Salvador, que hablaba 6 idiomas y que logró darle forma a su primer novela de alrededor de 500 páginas, titulada El Traductor, a la cual le puso todas las fichas, porque la novela, según los más cercanos, fue engendrar el hijo que nunca tuvo.

El segundo relato, es la mirada de sus colegas, amigos, cronistas quienes lo muestran desde el vínculo, de haber compartido sus ideas. Un entorno que lo admiró, lo tildó de romántico, por momentos y que nadie de ellos pensó que pudiera terminar su vida, suicidándose al tirarse del piso 10 de su departamento, el día 2 de enero de 1996, a los 43 años.

El tercer relato, el más fuerte, por la carga emocional, es narrar sobre Salvador, que también está escribiendo su propia vida, sufriendo de los avatares en el contexto del mapa cultural, político, económico de los años 90. Gracias a la tecnología, podemos ver a un Salvador Benesdra, auto-grabándose en ese piso 10, deprimido, auto-psicoanalizándose. El hombre, que pasó por cosas, como el hecho de pertenecer a ideologías de izquierda, trabajando en el diario Página 12, siendo el delegado gremial, no pudo evitar las convulsiones del momento, lo terminan despidiendo a él y a varios de sus compañeros. Un hombre que se decepciona porque el diario de izquierda, el que defendía supuestamente, al obrero, termina teniendo patrones, que se niegan a dar aumentos y a pagar indemnizaciones. Herido en sus convicciones, al caer el muro de Berlín, militante en el Partido de Política Obrero y luego se afilió al Partido Obrero. Un escritor, donde también hay un sello propio argentino, en donde su primer novela El Traductor, en su momento le fueron cerradas todas las puertas para su publicación, alegando que era una obra, que no fallaba en la calidad sino en no ser perfilada por los editores como un producto de difícil comprensión, lo que impedía comercialmente ser considerada.

Nunca sabremos, cuáles fueron las causas para tomar una decisión drástica, como no podemos decir a ciencia cierta, si fue el país que desperdiciaba el potencial de un profesional en el periodismo, un escritor que dejó una novela inconclusa, donde incursionó en un relato que tiene puntos innegables con la realidad actual. Es un rasgo característico de la Argentina, donde muchas figuras el reconocimiento, les llega post-mortem. Son buenos pero pasan por el castigo de verse privados, del reconocimiento público en vida.

La documental es llevadera, la investigación se centra en entrevistar a allegados, amigos, ex-esposa, y gracias a la tecnología, el mismo se auto-filmaba, hablándole a la cámara, exponiendo sobre lo que pensaba, demostrando a partir de fotos, ese hombre las pupilas se le van apagando, reconociendo su ex-pareja, que vivieron momentos donde se vió obligada a internarlo, por desórdenes sicológicos.

La historia está correctamente hilvanada, el afecto y cariño de muchos de los entrevistados perdura a pesar del paso del tiempo. Una película, de excelente fotografía.

Cuando terminó la documental no pude evitar de pensar que hubiese pasado, si ese hombre hoy estuviera entre nosotros, la cantidad de novelas que hubiese publicado, las conferencias que hubiese dado, las búsquedas internas para con la capacidad de resiliencia poder continuar con el paso del tiempo, tal vez lo hubiese esperado el hijo, mezclando realidades con ficción, la de Román en la primer novela, con las propias.

Ficha técnica

• Actores:
  Oliverio Torre,
  Ernesto Tenembaum,
  Elvio Gandolfo,
  Silvia Plager,
  Daniel Divinsky

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• Directores:
  Ariel Borenstein,
  Damián Finvarb

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• Guionistas:
  Ariel Borenstein,
  Damián Finvarb

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  Calificación: 6/10

Diana Decunto

consignas.de.radio@gmail.com

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